El despertador, siempre tocador de partes nobles, es especialmente grosero conforme avanza el desmadre. Pero dije que iría a la despertá.
Oh maravilla. Hay una docenita en la puerta de la carpa, y a goteo, van apareciendo y nos juntamos más de 30. Tantos, que me dan ganas de volverme a casa a seguir en lo que estaba. Mención especial a los Valiente que no perdonan una. La familia al completo. Un pin.
Y los de Canal 9 con su cámara y una locutora.
Reparten ceremoniosamente los petardos y Pipo Segarra toma el protagonismo necesario en estos protocolos de seguridad, que no dudo de su importancia pero cuánta espontaneidad se pierde, Mare meua.
Hicimos el recorrido y hubo alcachofa para unos cuantos, de los que pretendía la muchacha, a esas horas en las que uno apenas está, sacar algo inteligible. Intentaremos colgar aquí el reportaje.
Chocolatito reparador, y a casa.
La misa de 12 merece algún comentario. Somos 5 las comisiones que acudimos, en mayor o menor cantidad al Buen Pastor. Algunas deberían reconsiderar si vale la pena que vayan más músicos que falleros, y si es razonable llegar con media hora de retraso, disponiendo del tiempo de los demás, normalmente muy apretado en tan señalado día. No diré más que toíto se me entiende.
Pasacalle, el lazo para los estandartes junto a la Falla, mascletà, abordaje al aperitivo, y la paella gigante que convoca un buen llenazo "carpil". Pasteles, cava... hay que ver cómo se lo curra el "ponedor".
Y en seguida a desmontar todo, que n´hi ha berenar infantil.
Los mayores mientras, unos aprovechan para pegar una cabezadita, y otros para montar espectáculos de villanos, sean de baraja, qué utilidades más extrañas hemos encontrado al escenario este año, de dominó, y los hubo incluso especialmente "fotedores" con los petarditos, que pasaron a ser jarros de agua para apagarlos, aunque fuera debajo de mesas, y acabaron en carreritas para evitar "arruixons".
Aixó s´en va...
Sopar infantil, cremà. La cremà infantil merece comentario. Más que quemarse se desintegró ante nuestra vista, envuelta en ese humo negro tan "ecológico". Rocío, sin inmutarse, vio el The End de su reinado, del que apenas quedan coletillas hasta el relevo. Felicidades a ella, y a sus padres, tras este doblete.
Y a la Última Cena. El último chascarrillo. La sensación de que hemos sobrevivido un año más, que si dura otro día quizás ya no lo contamos, que qué paliza. Pero se acaba, y mordisqueamos el bocata con cierto aire de melancolía. Sale la Fallera Mayor, y da las gracias a todos, y salen las primeras lágrimas de la noche. El Himno, y ya se desbordan las aguas por sus mejillas.
Y en un plis plas nuestra casa de tantos días desaparece ante nuestros ojos. Allá van mesas, sillas, barras, depósito, vallas, restos de almacén,(poco, que queda pendiente de comentario el efecto Canada Dry, también llamado "esto pasa cuando damos Coca Cola de la buena y no zarzaparrilla"). Y castillo.
Y las últimas fotos.
Se enciende la mecha de la traca que acabará con las brujas, Fede, Aznar Zapatero, Rita y Rajoy...
Y más lágrimas. Abrazos y despedidas. La lluna en el mar riela.
Fins el any que ve.
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